Tendenciosos y egofans, forajidos
del buen gusto y amantes de lo irreverente. Coleccionistas de must haves y cazadores de tendencias.
Nueva semana, nuevo post. Dicen que la vida nunca es color de rosa. Algo que
por experiencia propia y faltando al post de hoy, he de suscribir. Sin embargo
es el momento de soñar y arriesgar, de colorear de rosa, o al menos intentarlo,
nuestro día a día. Ya me lo dijo mi madrina @estefaniac2t “nunca es demasiado
rosa”. Y del mismo modo “nunca se sueña demasiado alto”. Querer es poder, y
creo que a las puertas de 2014, es el momento de aplicarnos este mantra con más
fuerza que nunca.
Y para fuerza la que trae el rosa
candy esta temporada: desde Dior a Miu Miu, pasando por Carven o Rochas, sin olvidar
Giambattista Valli, Nº21 o Céline entre las firmas que encuentran en la gama
candy de tan femenino color su bandera para el otoño invierno de 2013/14.
Bandera que ya en su día hondearan
casas icono como Lanvin, Ricci o Schiaparelli. Todas ellas tiñeron de rosa las vidas
de cientos de mujeres y lo hicieron de la mano de las más bellas creaciones. El
look en clave pink del otoño de 2013 se construye con jersey masculino en punto
grueso y falda lápiz en los tejidos más ricos, se lleva con los siempre
vilipendiados pumps blacos, y encuentra en el clutch su mejor arma de
sofisticación.
Reflexionando sobre las
temporadas de los últimos años, la tónica en lo que a color se refiere venía
marcada por el culto al neón, dejando de lado la gama de tonalidades pastel tan
propias de estaciones estivales. Sin embargo, tras un estío en blanco y negro
como el que hemos tenido este año, marcado por la geometría; parece que los
popes de la moda coinciden en rendirse ante la candidez del rosa bebé o la
intensidad del rosa chicle, sin olvidar el todopoderoso rosa pétalo, como bien
acuñó el maestro de la Renta.
Color deseo y descubro color me
siento y me desnudo color. Color sueño y color despierto. Y dispuestos a
despertar, hoy lo hago con antojo: “I want candy!” (Pink, candy!).